De tanto fumar la pipa de la paz,
Ya no se a donde voy, ya no se a donde vas.
Mordí la tierra, perdí la guerra,
Ya perdí mi gran ilusión,
Ya no me quedan versos en esta canción.
Ya no se a donde voy, ya no se a donde vas.
Aquel invierno, tan frío, tan tierno. (Que bello era tenerte)
De repente mi loco corazón,
Sufrió y probó sin razón
El feo y amargo sabor,
De olvidar un amor, y aguantar el dolor.
Siempre quedo como un estúpido,
Rezando y poniendo una vela a Cupido.
Suficientes veces al año,
Yo era el único que padecía el daño,
Mientras que la poesía se cagaba de risa.
Y la poesía se me cagaba de risa,
De mis poemas de muchos versos,
De huecos vacíos y escasos besos.
Ya no busco un perdón,
Si no saber que le pasa a mi corazón.
¡Devuélveme aquel Febrero!
¡Devuélveme mi corazón de oro y acero!
¡Devuélveme esos momentos,
para olvidarme de que fueron lindos, de que fueron bellos!
Perdido en mi ignorancia, poco a poco olvido tu fragancia.
Sabina me enseño
Que hay caprichos de amor que una dama
No debe tener.
Por eso olvídate que estuviste en mi cama,
Y de que yo te hice dama.
Y ahora se invirtieron los roles.
La poesía se te caga de risa
De que otra mujer desabrocha mi camisa,
Y saca de mí ser una gran sonrisa.
¡Gracias Cupido ya no soy un entupido!
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